Hostal Casa Juana

Es un sitio que no recomendaria a nadie, atención, limpieza muy mal

El Check-in nos lo hizo un hombre muy poco afable, ni una sonrisa, ni una frase como "feliz estancia" salió de su boca. Solamente se limitó a tomarnos los datos y darnos la llave. La habitación estaba recién pintada, olía a pintura. No funcionaban ni la lámpara del techo, ni las de las mesillas, por lo que al acostarse en la cama había que levantarse para apagar la luz de la entrada, que iluminaba algo la habitación. La ducha tenía algo de moho en las esquinas y se escapaba el agua por la parte baja de la mampara ya que no cerraba bien. El somier estaba muy viejo. A favor: • La cama era enorme y muy cómoda (punto muy a favor, ya que sobre todo, a lo que se va a un hostal es a dormir). • La comida abundante y rica. • No tuvimos problema para aparcar en la puerta. Tuve que reservar este hostal 3 veces ya que viajábamos por un evento que se suspendió 2 veces. Pensábamos llevar un perro, después de reservar la primera vez pregunté si era posible llevar mascota (en las condiciones del hotel pone que sí, pero llamé para asegurarme) me dijeron que sí. La segunda vez que lo reservé me dijeron que no y la tercera me volvieron a decir que sí (cada vez una cosa) pero como hay veces que solo admiten perros pequeños, me dio por preguntar si importaba el peso del animal, ya que nuestro perro pesa 30kg y me dijeron que entonces no, que sólo hasta 10. Si no llego a preguntar ésto último a ver qué habría pasado si llegamos con el perro y luego no lo admiten después de haberme dicho únicamente que sí. Nos decidimos por este hostal por precio, era una de las opciones más baratas que encontramos, pero con un mínimo de comodidades exigibles, como baño privado.

Mucho cuidado a la hora de querer pagar con un cheque gourmet son unos estafadores tienen publicidad engañosa en la entrada y cuando llega la hora de pagar solo cobran en efectivo aún encima les he pedido una hoja de reclamación y no me la ha querido dar.